lunes, 20 de julio de 2009

Alegorias de Isidoro


Mar mediterráneo, al sur de la isla de Menorca.

Oteábamos desde lo alto la espera
que discernía sobre el tiempo
aun no perdido, sobre el misterio
de la luz que iluminaba las miradas.
Era la rutina de la mañana que nos asomaba
por un instante a Granada, al gallo,
que daba cuenta de su existencia
a la campana, a ese último beso, que balancea
su esqueleto sólo para el aire.

Pero en realidad, aun no hemos
visto juntos el mar desde la playa
en que tantas veces hemos coincidido.

*Tú dijiste: no creas Isidoro que no me duelo contigo,
pero es cansado hacerle faena diaria al tiempo, humillarle.

Y la espera desliza también desde
lo alto, una carga de ansiedad
multiplicada, casi en la misma medida
con que el deseo aprieta en los bolsillos,
la linde de la tierra prometida.

Y nos cambiaron la rutina del tiempo,
premonitorio cuerpo sucesivo
donde sólo yo permanezco,
tan nimio, como la memoria
de las lagrimas de Fuente Grande.



*Estos dos versos forman parte del poema “Venceremos” de L. Aguilar, que de algún modo, inspiraron estas alegorías del Isidoro del poema mencionado, y del ficticio Isidoro Capdepón de Federico García Lorca.

6 comentarios:

lichazul dijo...

antoni

cada vez que vengo a leer, me quedo saboreando la íntima visión de cada verso que nos compartes
es un lujo que nos dejas cada vez que subes un texto

muchas gracias por ello
FELIZ DIA DE LA AMISTAD!!!

besitos de luz

AnaR dijo...

Decia Henri Corbin que las alegorías nunca se descifran del todo...pero toda la percepción simbólica de este poema , a mi me ha parecido de una sublimidad, preciosa,creativa y expresiva.Un verdadero ejercicio de imaginería.

Precioso,Antoni.

Un abrazo

Ricardo Rivera Vasallo dijo...

La rutina del tiempo, qué tema.
Cuando éste avanza nuestro pasado se agranda, cuando este se detiene, nos arrepentimos y nos afligimos como la memoria y esos deseos que aprietan en los bolsillos.

Saludos, genial.

Cromatica dijo...

Mi recordado Antoni, he dejado que la noche y el silencio motiven mis versos, y lo logré. ntento volver.

Aprovecho para decirte que adoro esas fotos que acompañan tus poemas. Que bueno leerte a ti tambien.

sempre lontano dijo...

Oteabamos...

Así hay que ir... oteando la vida, para salir airosos, no lo dudes Isidore: Venceremos :)

lichazul dijo...

muchas gracias por tus luces dejadas en casa:=)
ten un precioso fin de semana

besitos